Montar un estudio audiovisual propio es una excelente decisión para ganar autonomía y calidad en la producción de contenidos. Sin embargo, es fácil caer en errores que pueden costar tiempo, dinero y frustración. En este artículo repasamos los fallos más habituales y cómo prevenirlos con una buena planificación.

No planificar el uso real del estudio

Un error frecuente es diseñar el espacio sin tener claro para qué se va a utilizar. Esto genera estudios poco prácticos o sobredimensionados.

Solución: define bien los formatos (entrevista, podcast, foto, formativo…) y diseña el espacio en función de ellos.

Descuidar la acústica

Se suele priorizar el aspecto visual y olvidar el control del sonido. Esto genera problemas difíciles y costosos de resolver después.

Solución: trata la acústica desde el principio con elementos sencillos: paneles, alfombras, cortinas, difusores.

Invertir en material inadecuado

A veces se elige material por moda o por exceso de prestaciones que no se van a aprovechar.

Solución: selecciona el equipamiento en función de las necesidades reales y pensando en la modularidad.

No prever bien la distribución técnica

Una mala planificación del cableado, enchufes o soportes genera caos y pérdida de tiempo en el día a día.

Solución: diseña el plan técnico como parte del proyecto desde el inicio y deja margen para futuras ampliaciones.

No contar con asesoramiento

Montar un estudio sin criterio técnico externo puede resultar en un espacio poco funcional o que se queda corto muy pronto.

Solución: consulta con profesionales que te ayuden a optimizar cada fase del proyecto.

¿Qué aporta PLAYDE?

En PLAYDE ayudamos a:

  • Identificar las necesidades reales antes de invertir.

  • Planificar el espacio y el equipamiento con visión de futuro.

  • Evitar errores que supongan sobrecostes o limitaciones técnicas.

 

Montar un estudio propio es una inversión estratégica. Evitar errores comunes desde el inicio es la mejor forma de asegurar un espacio práctico, escalable y eficiente.